En poco más de una hora de actuación, Cacho Castaña cautivó a la multitud que se reunió en la noche del sábado en el predio del Club Atlético para festejar el 108 Aniversario de la ciudad.
Más de siete mil almas se dieron cita para disfrutar del show del carismático cantante que abrió con el autobiográfico Cacho de Buenos Aires” que según manifestó expresa buena parte de su pensamiento y hace un recuento de las cosas que dejó en el camino por su forma de ser.
Los aplausos no se hicieron esperar y en el segundo tema ya se había generado ese relación especial entre el artista y el público, que motiva que el espectáculo se vaya desarrollando sin forzar nada.
De esa manera, se fueron sucediendo todos sus éxitos como “Garganta con arena”, “Café La Humedad”, “La Gata Varela” hasta remontar el tiempo y cantar “La Reina de la bailanta” y “El matador” que provocó que el ritmo de las canciones llegara a todos los rincones del predio y contagiara a los presentes, muchos de los cuales se animaron a bailar.
A pedido del público llegaron “Ojalá que no puedas”, “Que tango hay que cantar” y “Y apareciste tu” para regocijo de las fans de Cacho que no pararon de aplaudirlo. La despedida fue con “Septiembre del 88”, otro de los clásicos de su repertorio.
Vale decir que promediando su actuación, irrumpió el escenario La Tota Santillán -otro de los artistas convocados para el festival- y compartieron dos fragmentos de temas melódicos que enriquecieron la puesta en escena.
En resumen, Cacho Castaña cumplió con la expectativa que había generado y si bien la gente se quedó con ganas de más -el show duró exactamente una hora-, los prolongados aplausos aprobaron la producción de este artista consagrado.
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